Actualmente, es conocido por todos que la salud mental de las personas en general, y de la población más joven en concreto, se ha visto y se sigue viendo claramente perjudicada con la pandemia. Han aumentado los síntomas depresivos y ansiosos, las autolesiones, la conducta suicida y, de forma muy notable, los trastornos de la conducta alimentaria.A pesar de que no tenemos datos epidemiológicos actualizados que nos permitan conocer exactamente de qué incremento de casos de TCA estamos hablando...